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Nos localizamos en el futuro, un futuro no muy lejano del nuestro (50 después de que que inicio la tercera guerra mundial) en la estación espacial Salyut 8, esta estación solo contenía cierta cantidad de seres humanos, con pocas naves espaciales las cuales solo podían llegar a cierta distancia. Salyut 8 está a 8 años luz de distancia de la tierra, aunque hoy en día ya no es la tierra sino: Cyborgia. Ya que la misma está a medio construir y las naves que van llegando al borde traen consigo materiales laminados para terminar de construirla desde a dentro y todos los huéspedes se dedican de este “hotel futurista” de refugiados de la guerra que estallo en años pasados en lo que hoy es Cyborgia. Hay que tener en cuenta que en el espacio pueden fabricarse mejores cosas que en la tierra, los metales de Salyut 8 pueden pegarse por soldadura y pues la soldadura se hace mas rápido cuando no hay aire como es en el caso del espacio.
Salyut ocho estaba provisto por comida clonada, suministros de oxigeno artificial y calefacción a "planeta ricitos de oro".
—¡Llegaron las nuevas cargas! – una voz grito en el borde de la estación.
—De acuerdo las bajare de las naves!
Aquel que aviso por las cargar también lo ayuda.
—¿Serán suficientes?
—¿no se? , manda a las naves a buscar más material laminoso a la luna, terminaremos con estos después.
Los huéspedes e ingenieros fusionaban estos materiales laminosos convirtiéndolos en suelos, paredes y techos gracias a sus sopletes y a algunos androides programados para ayudar a los ingenieros a diseñar estas paredes y techos , hay que tener en cuenta que estos androides no son antropomórficos y no tienen mente propia.
En la zona de huéspedes las paredes están repletas de puertas y escaleras para llegar a aquellas a las que no se podía simplemente. De una de las puertas sale un joven de 17 años vestido como todos los huéspedes de la estación: camina y pantalón verde con el símbolo de la Sylut 8. Esté joven llamado Mark Starkiller se dirigía hasta la zona militar donde se encontraría con su mejor amigo Eric Monrow que estaba a punto de encaminarse a la guerra.
—Hey— exclamo Mark
—¿Como estas? — contesto Eric
—Pues suponiendo que no puedo estar en combate, muy mal — Mark le dijo
—Claro, quieres acompañarnos pero no puedes—le dijo Eric en un tono sarcástico
—De igual forma creo que no soy muy bueno piloteando naves y la guerra no es lo mío , prefiero resolver los problemas como una persona civilizada.
—Pues yo no , yo se que si eres bueno en algo pues debes explotarlo hasta que ya no puedas mas , así como yo soy muy bueno blanqueando al enemigo. Y tienes que saber que con quienes peleamos no son como nosotros.
—¿Contra quienes pelean? — pregunto Mark
- -Vaya estas tan metido en tu caparazón que ni te das cuenta de la guerra... ¡Son Cyborgs!...Mitad hombre, mitad maquina. – le contesto Eric a
—Pero... — exclamo Mark
Una alarma sonó de repente, los cadetes se cambiaron de puesto a ser soldados tan rápido y fueron llevados en una nave hasta Cyborgia , esto puso confundido a Mark, ¿Por qué los Cyborgs pelearían contra los humanos? , ¿Cómo empezó esto de la guerra?, ¿cuál es la razón de que pelean? ¿Qué tenemos que ganar o perder? Mark regresa a su habitación donde él y su madre una fanática religiosa viven. La casa era casi oscura ya que no había casi luz y solo tenían un androide que les ayudaba en la casa.
—Ya está listo el desayuno - dijo la madre de Mark con un tono medio frustrado pues de antemano sabia de los gustos de su hijo
—¿Qué hay de desayunar? - pregunto Mark.
-Espagueti Soonett Sticklant
Soonett Sticklant era aquel que invento la clonación de la comida, reserva de la cual la Salyut 8 estaba repleta y si una 1/3 parte de la reserva se acabara, clonaran otra de otra tercera parte de la reserva.
—Madre, Eric se fue a pelear a Cyborgia.
—Espero que salga ileso.
—El me hablo de que está repleta de Cyborgs, no me lo esperaba.
—Esas son puras cosas del diablo, lo que Eric te dijo son puras blasfemias. Agradécele a dios que te dio un cerebro común y corriente y no un Cerebro positrónico. Dios creó a los humanos a su imagen y semejanza y creo esta gloriosa estación.
—Si él la creo, ¿por qué no la termina?
—No quiere que seamos holgazanes y quiere vernos trabajar.
—¿Por qué no te pones a trabajar?.
—Esa no es forma de hablarle a tu madre, termina de desayunar.
—Eres Salyutense, no uno de esos asquerosos supremacistas biónicos.
Como la mayoría de los ciudadanos Salyutenses su religión era Organocionismo, religión la cual dicta que todos los humanos fueron creados a partir del la mano del señor dios y que todo aquel que haga un pacto con el bionicismo podrá arder en el infierno que el mismo ha creado. Mark después de terminar sus Espaguetis, salió de pronto de la habitación.
—¿A dónde vas con tanta prisa? — le pregunta su madre.
—Voy a andar por ahí — le contesto Mark.
—Debes ayudarme a ir a la iglesia.
—¡Pues que te ayude tu androide! – le contesta Mark muy frustrado.
Mark sale de la zona de huéspedes, en camino a la zona de investigación Salyutense. Un guardia de seguridad lo detuvo antes de tocar la puerta.
—¡Hey!, tú no eres científico, ni te le pareces a ninguno por los que allá pasado por esta puerta. – le grito el guardia a Mark.
—Soy amigo del doctor Monrow.
—Si claro, largo de aquí.
De la puerta de la zona sale el Dr. Monrow.
—¿Alguien dijo mi nombre? – pregunto el Doctor a aquel guardia de seguridad.
—Solo este sujeto Doctor.
—Déjelo pasar – le dijo el Dr. Monrow al guardia.
—Tuviste suerte nada mas – le susurro el guardia a Mark mientras entraba detrás del Doctor Monrow.
Mark entra a la zona donde encuentra un montón de pantallas de computadora en las paredes, una cabina de tele transportación siendo observada por científicos, ingenieros e ingenieras y a solo dos metros de ella de distancia se encuentra la segunda cabina de tele transportación que codifica una nave entera.
—¿Qué es todo esto? – Pregunto Mark asombrado.
—Es nuestro nuevo proyecto de guerra, cabinas de tele-transportación solo tenemos que navegar hasta dentro de una y se tele-transportara hasta donde Cyborgia y los atacaremos por sorpresa.
—¿Pero para eso no debe de haber otra cabina en Cyborgia?.
El Dr. Monrow se quedo con una vista fija sin decir ninguna palabra y después dijo:
—Continuemos… ¿a qué has venido? .
—Usted es la persona más inteligente que conozco de aquí y...
—Pues gracias, sé que no soy el único de aquí. – le interrumpe el doctor Monrow.
—Quería preguntarle ¿Quiénes son los Cyborgs?
—Ouch, la verdad es que la Organocionismo nos prohíbe hablar de eso , pero ven .
El Dr. Monrow llevo a Mark hasta donde su espacio personal para sus artefactos, planos y su propio escritorio, saco un cuaderno, lleno de anotaciones y fotografías sueltas.
—Veras todo comenzó En Japón quería convencer al presidente de Estados Unidos de que los implantes bionicos son completamente seguros , sin embargo estados unidos no acepto la importación del producto. Claro que Japón importo varios mecanismos a ser partes bionicas para el cuerpo humano.
—¿Ilegales? - pregunto Mark.
—Si — le contesto Monrow - con los inmigrantes , los implantamientos bionicos se popularizaron y la gente empezó a hacerlos de la misma forma , ilegal y la gente que los trataba empezó a transplantarlos a las personas por un menor precio cada vez. El crimen empezó a desatarse en varios países como la misma Japón , China , Gran Bretaña y la India. ¡Empezó la tercera guerra mundial! , crimes por humanos con partes bionicas, se hacían mas fuertes, mas astutos, si perdían un brazo les implantaban uno mecánico , asaltaban tiendas , etc.
—¿hubo otras dos guerras?
—si , pero supongo que no las conoces, como sea, Estados Unidos al tanto de esto estableció una propuesta a toda América si legalizar o no los implantes bionicos. 5 años mas tarde , la ciudad estaba cubierta de carteles "dígale si a la propuesta 247 y legalice la bionica" , en ese tiempo Alemania invadió España y los Republicanos monopolizaron en ciudades como los estados del sur de Canadá y los del norte de México. Japón cansado de esperar una respuesta tenia preparada una invasión. Los científicos fueron obligados a aparearse entre ellos mismos . Científicos, políticos y los estudiantes mas brillantes fueron reunidos , solo tenían 15 minutos para despedirse de sus familiares.
—Que cruel.
—Es cruel, pero es asi. La N.A.S.A. en estado de alerta tenia que poner en practica su nueva estación espacial.
—Saliyut 8, por eso estamos aquí.
—Salyut 8 estaba puesta en órbita y los humanos mas importantes fueron enviados al espacio a terminar de construir la estación ellos mismos, cosa que anteriormente nunca se había hecho ya que antes se usaban androides.
—¿Y el Organicismo?
—Lo inventaron las mujeres religiosas para encubrir la guerra a los futuros descendientes.
—¿Por que me lo cuentas tu?
—Te iras ala guerra pronto, ¿No es así?
—Si, el próximo año.
—Ahora que lo sabes debes saber que no es en vano resiento que tu defenderás el planeta que por derecho era de nuestros antepasados.
Mark con la cabeza llena de mas preguntas que respuestas decidió hablar con su comandante supremo ala zona militar , hay no fue tan difícil de entrar solo saludo al soldado en jefe y entro ala zona para encontrarse con su comandante Scott Ryan.
—Buen día señor — saluda Mark.
—Buen día cadete
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